Estoy solo. Hoy estoy triste.
Paso las horas sentado en tu puerta
esperando volver a verte; esperando que vuelvas.
Miro el reloj; ya son las doce
¿Dónde estás? ¿Dónde te escondes?
Enciendo un cigarro; el humo ciega mis ojos.
Mi desquiciada mente se llena de enojos.
Ya no aguanto esa insoportable espera
eres mala, mala y traicionera.
Mi perro aúlla en silencio a la luna de sus ojos
Y mientras un charco se forma en mis pies…
rojo, rojo rojo.
Mi sangre es tuya; ya no la quiero.
Duelen más las heridas que tengo por dentro.
Qué de amor ya no se muere, decía la canción.
Entonces dime… ¿Por qué muero yo?
Por Dios, qué impaciente eres!
ResponderEliminar¡Caramba! es muy extremista el tipo...
ResponderEliminarBesitos
Chicas, bebo deciros que la muchacha llegó 5 minutos después cuando ya estaba allí el SAMUR. jeje
ResponderEliminarUnos Besazos.