Una vez, alguien, me preguntó por qué escribía.
Le miré a los ojos, intente sonreír y me encogí de hombros; en ese momento no supe qué contestar:
Quizás escriba para poder contar mentiras; o para esconder verdades entre palabras que nunca lo fueron.
Quizá sea para convertirme en aquellos personajes que nunca he sido y que nunca seré; o para intentar exteriorizar de alguna forma mis vicios y secretos más ocultos.
O quizá solo escriba para expresar aquellos sentimientos que gracias a mi forma de ser jamás saldrían de mi boca; o para que aquella persona que lea aquella poesía, o ese relato pueda olvidar por unos minutos sus problemas; o para olvidar yo los míos.
Quizá solo escriba para pasar el rato; o simplemente, porque algunas veces me encuentro con un papel y un bolígrafo en mis manos.
Y tú, ¿por qué escribes?
Pues...por lo mismo, ¿no?
ResponderEliminarPues has reflejado bastantes de mis motivos, aunque el más importante es que me es tan necesario como respirar. Creo que es motivo suficiente ¿no?
ResponderEliminarBesitos
Me ha gustado mucho esta entrada, se ve muy sincera Raulito ;) Yo tampoco sé bien por qué escribo.... algún día pensaré en ello con tranquilidad jejeje muaccks
ResponderEliminarBueno, pues ya sabemos un poco más de porque escribimos cada uno.
ResponderEliminarUnos besazos.